El nacimiento de mis hijas ha sido lo mas grande que me pudo suceder en mi vida... Gracias Dios mío, porque todo ha merecido la pena.
Y pensar que cuando concebimos a esta preciosidad de mujer me ofrecieron el aborto... Nada más deseado en el mundo que Verónica... Luego nada fué fácil, ni lo mismo. Toda una vida de lucha y también de equivocaciones, sobre todo por algunas personas que no te aceptaron y quisieron ocultarte.
El tiempo pone a cada uno en su lugar y ahora me encuentro con una guapísima mujer luchadora e inteligente, con los problemas que todos sufrimos... Pero radiante y feliz sentimentalmente y todo un roble de persona.
Has sido madre y has dado a luz un presioso niño, mi nieto.
Que siga la vida, amor... que siga y nunca cese.
No hay comentarios:
Publicar un comentario