martes, 3 de noviembre de 2009

Dulce sabor de venganza...



Repentínamente al pasar por delante, mi vista se agudizó en el paisaje urbano y ajetreado. Era él, sin duda alguna, el mismo que hacía unas navidades por jorobarme a mí y complacer a mi ex, anuló una reserva de hotel en el centro de Avilés, era fin de año y me hacía mucha ilusión comerme las uvas con mi novia en plan romántico.

Pero aquel muchacho se tomó la molestia de anular mi plan haciéndose pasar por mí. Hubo alguna filtración informativa y el plan les salió OK...

Al final pude encontrar otro hotel más barato y confortable dejando a sí mismo dejé de ser cliente del hotel que siempre era habitual... cosas de la vida.

Allí estaba delante de mis ojos y merodeando, como un pingüino esperando un taxi con la mano levantada, con el frío que hacía:

-Brrrr!!! ¡¡¡ TAXI !!!

FFFFFiuuuuuuuuuuuu!!!!! pasé de largo en una décima de segundo más de lo habitual y pude ver como agachó la cabeza avergonzado por la fatal coincidencia y el cruce de miradas.


Lo siento, no suelo hacer esas cosas con mis clientes y menos cuando hace frío.
Pero más frío pasé yo por las calles de Avilés buscando un hotel con la maleta a cuestas, mientras celebraban la fechoría...

Ya lo he dicho muchas veces que Zaragoza no es Madriz y aquí la pelota vuelve muchas veces a la mano y aunque no sea vengativo, si me ponen el dedo en la boca, muerdo.

Feliz Navidad, de nuevo viejo !!!!

2 comentarios:

  1. Ésta será nuestra cuarta navidad juntos y ellos...bueno,¿qué importan ellos?
    TE AMO

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  2. jua,jua,jua,jua...por el gilipollas que se cantó de frío por mala nata. muy bien, hay que cobrar siempre, total somos pacientes y llega.

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