martes, 5 de agosto de 2008

Muy simpático



La otra noche, cogí a un señor, que me sonaba su cara, lo había visto en alguna parte, pero no sabía donde. Después de mucho pensar y sin lograr recordar donde lo ví anteriormente; para romper el hielo, le pregunté: ¿Que tal, vaya día que tenemos hoy ,eh?. Me miró directamente a los ojos a través del espejo retrovisor, y me lanzó una sonrisa deslumbrante, que casi me hizo daño en mis ojos acostumbrados a la oscuridad y me dijo: ¿Día dice? yo diría noche, amigo.

Lléveme si es tan amable a Conde de Aranda frente al 38, vaya por Diputados y me déjeme enfrente.

-De todas formas vaya noche que hace de calor, de cojones.
-Sí, ya lo creo hay 32º en la calle a éstas horas.
-Hoy en el juzgado, nos han autorizado a quitarnos la toga, del calor que hacía, oiga.
-Así que es usted juez?
-No soy fiscal, el que se enfrenta a todos los chorizos y H.P. de Zaragoza. Habría que matarlos a todos.
-Mmmmm. No sé.
-Nada, ahora voy a ver a mi madre, que está malita la pobre, y pasa un calor...
- Sí, yo hasta con aire acondicionado estoy sudando ahora.
-Vaya vida, que tengo mas mala, ¡ Dios Mío !, menos mal que me lo tomo con calma.
Se despidió con tal sonrisa, que el resplandor, alumbraba todas las palmeras de la calle Conde Aranda.
Que señor más agradable, no quiero imaginarme a nadie en el banquillo sentado frente a su dedo acusador, y en vez de su sonrisa mostrase su peor gesto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario