domingo, 1 de agosto de 2010

Donde quieras que estés...



  • Pase lo que pase, seguiré siendo yo.

Seguiré equivocándome, seguiré aprendiendo de mis errores, conviviendo con la incertidumbre de dudar el camino mejor... Al final será siempre el destino el encargado de establecer las coordenadas.

  • Pase lo que pase, seguiré siendo yo.

Creo en tí aunque no te vea, te siento cerca, cuando los hermosos momentos que me regalas acarician mi piel. Cualquiera no puede sentirte, sólo los que aprendimos a mirar y observar, oir y escuchar. No es lo mismo, no.

  • Pase lo que pase, seguiré siendo yo.

Aunque mañana fuese mi último día, me bastaría y me sentiría recompensado por tí. Por la intensidad que me otorgaste, por los anocheceres y amaneceres. Por las buenas personas que conocí y otras que aunque menos, pude tenerles como ejemplo de lo que nunca fuí ni deseé....

  • Pase lo que pase, seguiré siendo yo.

Porque tú siempre estuviste a mi lado y siempre me protegiste de mis imprudencias, siempre me ayudaste a no enloquecer; saborear la amargura y llorar para desahogar. Enviaste un angel que me protegiera y luchase contra mi tozudez, a veces agresiva.

  • -¿Merezco ese honor?
Donde quieras que estés, te envío las gracias por ayudarme tanto, tanto, tanto. Estoy dispuesto a seguir el camino que me indiques para cumplir la misión más importante:

  • -Seguir viviendo, siendo yo mismo.




1 comentario: